Descripción
Anexa a la central eléctrica de 1962, la esclusa va a permitir recuperar la navegación entre Cremona y Piacenza hasta ahora interrumpida por el descenso del caudal. Integrada en el entorno supone el primer hito en la regeneración del río Po.
Solución ULMA
Al tratarse de un espacio fluvial y para evitar debilidades en la estructura se ha construido la dársena de forma monolítica y sin juntas. En 4.000 m² se ha ejecutado esta estructura de 115 m x 12,50 m y una profundidad de 23 m en los huecos laterales.
En la ejecución de los muros perimetrales de más de 30 m de altura en tongadas de 6 m se han mantenido los estándares de seguridad y el cronograma establecido por el cliente. Con más de 320 m de longitud y 5.000 m², los muros a una cara de 15 m de altura bajo el nivel de las aguas se han hormigonado en 8 tramos de 20 m.
Tras la estabilización de los muros laterales, se han empleado consolas de trepado a una cara MK con encofrado modular ORMA y encofrado circular ajustable. Los sistemas se han adaptado a la perfección a la geometría irregular de los muros además de proporcionar un alto nivel de calidad. El trepado se ha realizado en tongadas de 3,5 m de altura. Una vez alcanzada la superficie a 37 m de altura, se emplearon consolas de trepado BMK a dos caras
A pesar de los espacios reducidos de trabajo, las alturas considerables y la interferencia de otros sistemas montados en paralelos, la coordinación y la seguridad de los trabajos ha sido clave.
Además, el estudio minucioso y una adecuada planificación y rotación de los productos ULMA han permitido obtener el máximo rendimiento y reducir los trabajos in situ.